La Cartografia de un Capitalista (Para Ruben, amor mío)

Después de haber leeido el Capital de Marx, o el Manifiesto Comunista, obras de la filosofia marxista tan criticadas hoy por hoy por una supuesta incompatibilidad que mana de nuestros tiempos posmodernos. Todo eso que yo había leído sobre la imagen de un ser capitalista del siglo XVIII los palpé con mis manos y los observe moverse con mi propios ojos, los escuche además con sus tonos de boces que me remitian a las citadas obras del sociólogo alemán.

confieso que tales manifestaciones del despotismo burgués me indignaron pero solo fue el inicio de lo que mas tarde compredí sobre este personaje contemporáneo, que causó nostalgia en mí mente, una pequeña desilución como una chispa de agua fría en el rostro que te destantea.

Era él, encarnado en el personaje que comenzaba a temer y en ocasiones insultar, eso fue lo que me horroriso mas; escucharlo por un teléfono hablarme de forma apresurada, y con un ego ensalzado por los estímulos de motivadores empresariales, sus palabras me abofetearon, me mostraron una ambición viva, pirañesca actitud que deseaba mas cada vez y que cualquier cantidad monetaria le comenzaba a parecer poco, comenzaba su día y terminaba de igual forma bajo las presiones de un máximo rendimiento corporal y mental, máximo y constante despempeño de la aptitudes y capacidades, la promesa una escala en la jerarquía de una empresa, los rasgos físicos comienzan a manifestarse, problemas instestinales, ojos llorosos, profundos y ansiosos, de tiempo abarrotado, sin oportunidad de convivencia, de esparcimiento, cualquier alución al ocio le comienza a parecer absurda e innecesaria, los ratos de ocio son despreciados y maldesidos, todo es producción, todo es acumulación, mi miedo es que esta personalidad triunfe sobre él, mi amante y que le basié hasta la ultima gota de piedad y se vuelva barbaro y material.

así pues digo que el capitalista es un sujeto muy actual, podemos ser hasta nosotros mismo, mas ambrientoa, mas acumuladores, personalidad muy común en ambas clases sociales, es el máximo ideal masculino y también femenino, es la felicidad y el confort lo que anelan y en su forma radical es la diferencia social drástica y dramática el deleite absurdo.

ahora mi nostalgia al pasado hace que me llamen "perdedor" "falto de ambición" condenado a la "pobreza" hasta ridiculamente "ocioso", y mis lágrimas corren amargas por él y por mí, por la sociedad que camina jubilosa a una barbarie obscena, monstruosa por que desgarra el ser y su derecho natural de vivir.

Dice Marx que "el trabajo hace al hombre" pero el trabajo digno y humano, el que purifica, el que incentiva mas halla de su recompenza brillante a la reproducción de la vida social, mas que metal divisor sera recompenza espiritual que os guiara a reencontrarnos con el amor que es tambíen concepto plural.